La función de Replicación Remota (RR) de los
NAS QNAP, está dirigida a replicar datos de forma programada desde un
NAS hacia otro
NAS o un
servidor Rsync, mientras que la función de Replicación Remota en Tiempo Real (RTRR), está dirigida a replicar datos en tiempo real desde un
NAS hacia otro
NAS o un
servidor FTP.
El
NAS de origen es el que ejecuta la replicación de datos, y por tanto, sobre el que recae la mayor cantidad del trabajo. Debido a esto, en caso de utilizar la función de Replicación Remota en Tiempo Real, se recomienda que el
NAS de origen sea un equipo basado en
arquitectura Intel (más potente que la
arquitectura ARM). Además, la Replicación Remota en Tiempo Real está limitada a un máximo de 8 tareas en los
NAS ARM, mientras que en los
NAS Intel (x86) está limitada a un máximo de 32 tareas (cada tarea admite un máximo de 5 pares de carpetas).
Ambos tipos de replicación de datos son muy fáciles de configurar y aptos para ejecutarse en redes locales, pero para replicar datos desde una red local hacia una red remota mediante Internet, lo ideal es utilizar la función de Replicación Remota (simple). Esto se debe a la baja velocidad del canal de subida que se obtiene en la inmensa mayoría de conexiones a Internet, la cual, no suele superar el 1Mbps (128KBps) normalmente.
Tienes más información al respecto en el
manual del usuario.
Mi consejo: Si el presupuesto es muy ajustado, bastaría con dos
NAS TS-212. Uno localizado en el trabajo para almacenar las copias de seguridad y otro localizado en casa para replicar dichas copias de forma programada con la función de Replicación Remota, cuando menos tráfico exista en la conexión a Internet, es decir, de noche normalmente. En este caso, se recomienda utilizar las opciones de cifrado, compresión y replicación incremental.